Inefabilidad es la imposibilidad de expresar con palabras lo que se siente en el corazón… No hay palabras suficientes ni emocionalmente adecuadas que satisfagan nuestros sentimientos de agradecimiento al Dr. Hernando Abaúnza Orjuela. Su partida al muy merecido y justo descanso nos deja el vacío de su ausencia terrenal cotidiana, pero al mismo tiempo nos da con resignación la satisfacción y agradecimiento a la vida de haber sido iluminados por un ser humano muy especial. Todos los cirujanos de Colombia, al igual que muchos de América Latina y del mundo fuimos influenciados de alguna manera por el maestro Abaunza. Su vocación educativa fue ejemplar en Colombia desde el escenario de la Asociación Colombiana de Cirugía, iniciando como cofundador y posteriormente desempeñando todos los cargos de su junta directiva, hasta dar origen y desempeñarse como Director Ejecutivo durante 32 años consecutivos. Sus sacrificios profesionales y familiares anteponiendo nuestra asociación a sus aspiraciones personales fueron secretos conocidos por muy pocos… Gracias Maestro, mil gracias por ese gesto de vida… ¿Cómo pagar esa deuda? La dedicación y entrega total del profesor Abaunza al servicio de la Asociación Colombiana de Cirugía y por ende de todos los cirujanos de este país, creo unos lazos afectivos indisolubles? llevando a considerarla en sus propias palabras como la mayor de sus hijas adoptivas, la otra fue la FELAC, no menos importante para él en donde desempeño también papeles protagónicos siendo su presidente y director ejecutivo durante varios años.